Régimen cubano acosa a sacerdote por convocar a oración pública a favor de “paz y justicia” para Venezuela
El sacerdote católico Kenny Fernández Delgado denunció recientemente las presiones que ha sufrido por parte del Ministerio del Interior de Cuba (Minint), tras expresarse en redes sociales a favor de la ciudadanía que en Venezuela defiende su voto, frente al intento de fraude de Nicolás Maduro. Estamos al tanto y nos preocupan sus reportes de acoso y amenaza por parte de las autoridades.
Fernández Delgado convocó para la mañana del 3 de agosto de 2024, a orar en familia “en cada ciudad, en cada parque”, y “sin miedo”, “por Cuba y Venezuela”. Tras invitar a esta acción de naturaleza cívico-religiosa, Kenny Fernández fue citado bajo amenaza para el mismo día y hora, por la Dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería (DIIE), adscrita al Minint.
El 10 de agosto, una semana después del incidente, el padre Fernández explicó en sus redes la justificación dada por las autoridades para citarlo, así como las circunstancias de su interrogatorio con un teniente coronel del Minint, quien lo había amenazado con que habría “consecuencias” si no se presentaba.
De acuerdo con el testimonio del sacerdote, la DIIE lo citó para inquirir sobre un pequeño apartamento que Kenny Fernández renta a cubanos, desde antes de ordenarse como sacerdote católico. La justificación es que tenían la potestad de interrogarlo periódicamente ante la posibilidad, negada por el sacerdote, de que el apartamento fuera rentado a extranjeros. Pero una vez allí confirmó sus sospechas: el motivo real de convocarlo era disuadirlo de su invitación a la oración por Venezuela.
Kenny Fernández Delgado denunció que fue cuestionado por sus publicaciones en redes sociales, críticas con los regímenes de La Habana y Caracas, y a favor de “una solución de conflictos donde reine la paz y la justicia en Venezuela y Cuba”.
También le prohibieron convocar a orar en sitios públicos, con la justificación de que podría ser aprovechado para “cometer crímenes contra la revolución [cubana]”. También la oficialidad lo acusó de que su llamado “no era imparcial”, cuestionando que compartiera contenido asociado a la opositora venezolana María Corina Machado.
El sacerdote dijo a Martí Noticias que otras veces las autoridades le han prohibido procesiones en los poblados Madruga y Aguacate (provincia de Mayabeque), dos de las parroquias donde oficiaba antes de atender una iglesia en el municipio Cerro, en La Habana.
También es conocido por su respaldo a los familiares de presos políticos del estallido social de julio de 2021 (11J). Además, marchó en noviembre de 2021 para apoyar la convocatoria a una Marcha Cívica por el Cambio (15N), entre otras acciones y pronunciamientos que cuestionan la doctrina oficial.
En Cuba no se tolera ninguna expresión de solidaridad con el pueblo venezolano en medio de la ofensiva antidemocrática actual. Sin embargo, amplios sectores de la ciudadanía cubana, entre los que se incluyen a título personal el padre Kenny Fernández y otros líderes religiosos, se desmarcan de la posición oficial del régimen del Partido Comunista de Cuba, respecto a Venezuela.
Así lo evidencian también las organizaciones de la sociedad civil cubana que en los últimos días nos hemos unido a nuestras homólogas de la región y el mundo, para pronunciarnos contra los ataques a los manifestantes en Venezuela y la persecución de los liderazgos políticos de oposición y los defensores de derechos humanos.
Prácticas habituales en Cuba, como la sistemática violación de los derechos civiles y políticos, la criminalización de la protesta, las detenciones arbitrarias masivas y los injustos procesos penales, entre otras, han sido “exportadas” a Venezuela por el régimen de La Habana.
Alertamos sobre las recientes acciones contra el padre Kenny Fernández Delgado, como muestra del estricto cierre del espacio cívico en Cuba y la colaboración autoritaria entre ambos regímenes.
