Actualización sobre condiciones de prisiones (julio de 2023)
Además de las violaciones de derechos humanos recurrentes en las prisiones cubanas, el mes de julio se distinguió por las protestas que realizaron reclusos, con motivo del segundo aniversario del 11J, y las represalias tomadas por las autoridades penitenciarias.
Se tuvo conocimiento de las huelgas de hambre realizadas en conmemoración a la fecha por Luis Manuel Otero, Denys Hernández, Adrián Rodríguez y otro recluso de la prisión de Guanajay (Artemisa), así como Daniel Moreno en el Combinado del Este (La Habana). También se registraron ayunos de diferentes duraciones por parte de las Damas de Blanco Tania Echavarría, Saylí Navarro y Sissi Abascal en la prisión La Bellotex (Matanzas), Eriberto Téllez en la cárcel El Caguayo (Santiago de Cuba) Adael Jesús Leyva, Yoanky Báez y otros reclusos del Combinado del Este y José Rodríguez, Armando Guerra y otros prisioneros de la cárcel Guamajal (Villa Clara).
También como protestas en el contexto del aniversario del 11J, Maykel Castillo (Osorbo) se cosió la boca en la cárcel Kilo 5 ½ (Pinar del Río); se vistieron de blanco Aniette González, Ienelis Delgado, Mayelín Rodríguez y Yennys Artola en la Prisión de Mujeres Granja 5 (Camagüey) e Idael Naranjo, Yerandis Rillo y Yander Rodríguez en el Combinado del Este. Este último, además, se afeitó la cabeza y se negó a usar colchón. Presos políticos de varias cárceles, miembros del movimiento “Libertad y Derecho”, firmaron una declaración en la cual expresaron que no pararán de luchar hasta restaurar la democracia y el respeto a los derechos humanos en Cuba.
Por estas manifestaciones pacíficas varios prisioneros fueron trasladados a celdas de castigo, sufrieron amenazas, les impidieron acceder a beneficios y sufrieron desapariciones de corta duración.
Juan Enrique Pérez, prisionero del 11J, recibió una brutal golpiza y fue llevado a celda de castigo por presentarse el día 10 de julio al comedor del penal de Quivicán (Mayabeque) con un pulóver y un cartel con frases antigubernamentales.
Durante el mes se registraron otras protestas en las cárceles, asociadas fundamentalmente a las malas condiciones de las mismas, las violaciones de derechos y la impunidad de las autoridades. Estas incluyeron las huelgas de hambre de Josiel Guía y William Cepero (Valle Grande, La Habana), Eduardo Álvarez (Combinado del Este), Lázaro Leonardo Rodríguez “Pupito Ensy” (Estación de la policía de Guanabacoa, La Habana), Duvier Medina, Carlos Jesús Ramírez, Rolando Fernández, Danisbel Labrada y Antonio Andrés González, (Ariza, Cienfuegos), Ariel Denis Valdés (El Pitirre, La Habana), Rolando Yusef Pérez y Maikel Puig (Quivicán), Adrián Rodríguez y Aleandry Lechuga (Guanajay), José Miguel Gómez, (Correccional Valle del Yabú, Villa Clara), Yunaiky Linares (Prisión de Mujeres de Occidente, La Habana), Ángel Alexei Marín (penal Nieves Morejón, Sancti Spíritus), así como Orlando Perdomo Concepción, Adriel Serrano Díaz, Oreste Almaguer Molina, Rafael Peña Fons y Danilo González Pavón y otros nueve reclusos, cuyos nombres se desconocen, en la prisión Agüica (Matanzas).
En total, al menos 36 personas privadas de libertad realizaron huelgas de hambre durante el mes de julio y una regularidad observada fue el envío a celdas de castigo, a veces sin colchón, sin ropa y sin recibir atención médica.
Justicia 11J registró durante el mes de julio 128 hechos relacionados con personas privadas de libertad, ocurridos en 40 centros penitenciarios y de detención de todas las provincias del país y el municipio especial Isla de la Juventud. La Habana, Mayabeque, Villa Clara y Camagüey fueron los territorios donde se obtuvieron mayor cantidad de denuncias. Se contabilizaron 19 mujeres y 78 hombres víctimas, al menos una vez, de alguna violación de sus derechos humanos
Entre los incidentes más frecuentes estuvieron las denuncias por falta o negación de asistencia médica. Durante el mes se recogieron 35 hechos, procedentes de 20 prisiones, en los cuales se denunciaron situaciones de salud de al menos 26 prisioneros. En casi todos los casos, la regularidad fue la ausencia de medicamentos, las negativas a la atención de especialistas y el comportamiento indolente de las autoridades penitenciarias ante los reclamos de los reclusos, en algunos casos llegando a tomar características de tortura.
Así sucedió con Yasmani Hernández, quien se cortó las venas y, a pesar del llamado de sus compañeros de celda, los guardias de Kilo 9 (Camagüey) dijeron que iban a dejar que “se desangrara un poco” y demoraron en socorrerlo, según denunciaron desde el penal. En la Prisión 4 de San Juan y Martínez (Pinar del Río) falleció al día siguiente de ser llevado al hospital el prisionero Luis Alexis Hernández, luego de una semana sin que fueran atendidas la neumonía y leptospirosis que contrajo en el penal. También, durante el mes, fueron regresados a sus celdas, a pesar de las condiciones críticas de salud que padecen, los presos políticos Loreto Hernández, Taimir García y Javier Delgado, este último luego de concluir el año de licencia extrapenal que le había sido otorgado.
La situación de salud de los reclusos se vuelve más vulnerable debido a las condiciones infrahumanas de las prisiones del país. Se recibieron denuncias de mala alimentación en las cárceles de El Paraíso (Mayabeque), La Bellotex, La Guanajera (Villa Clara), La Herradura (Sancti Spíritus), Kilo 8 y Kilo 9 (Camagüey) y Combinado del Este. En estos tres últimos penales entregaron comida descompuesta, lo que provocó brotes diarreicos entre los reclusos.
A esto se suman los problemas con la higiene y el abasto de agua denunciados en prisiones como Canaleta (Ciego de Ávila) y Paso de Cuba (Guantánamo). Esta mezcla de mala alimentación, falta de higiene y de medicamentos, contribuye a la proliferación de enfermedades como el dengue y plagas de chinches y cucarachas.
A estas condiciones, que de por sí constituyen formas de tortura, se une el accionar violatorio de las autoridades penitenciarias para agravar la existencia de los reclusos.
Durante el mes se recogieron varias denuncias de violencia por parte de guardias y oficiales. El jefe de la prisión Alambradas (Villa Clara) amenazó de muerte y con golpizas a los presos del 11J Carlos Michel Morales, Leonel Tristá y Liván Hernández; Dariel Santiesteban recibió una golpiza con bastón por parte del jefe de orden interior de Kilo 9, negándole luego atención médica; en Quivicán el segundo jefe de la prisión Yuleiky Montero ofendió y zarandeó por el uniforme a varios presos políticos que reclamaban llamar por teléfono; a Duannis León en el Combinado del Este un teniente coronel le mostró supuestas evidencias de delitos que le están fabricando a sus familiares y le dijo que su madre debía parar de hacer denuncias porque podía amanecer muerta. En este mismo penal el teniente coronel Adonis Charchabal esposó durante 24 horas a Eduardo Álvarez y se han reportado arbitrariedades y tratos denigrantes a los familiares cuando van a las visitas. La esposa de un recluso denunció que los presos comunes que trabajan con los guardias en el Combinado del Este portan armas blancas, y venden los minutos de teléfono y mayores raciones de comida en el comedor sin que las autoridades hagan nada al respecto.
Preocupante resulta la situación de los presos políticos en Quivicán, quienes están siendo hostigados constantemente y en formas cada vez más graves por reos comunes coludidos con las autoridades. En situación similar se encuentran Ienelis Delgado en Granja 5, Lizandra Góngora en Los Colonos (Isla de la Juventud) y Luis Armando Cruz en el Combinado del Este.
Continúa la práctica de desaparecer por períodos cortos y medianos a reclusos, como ocurrió este mes con Roberto Pérez Fonseca en Quivicán y Yussuan Villalba en el Combinado del Este, ambos previo al 11 de julio; y con José Miguel Gómez en el correccional Valle del Yabú y William Cepero en Valle Grande, cuando se encontraban en huelga de hambre.
También es frecuente el uso indiscriminado de las celdas de castigo, las cuales generalmente tienen condiciones aún peores que el resto del penal. El opositor Félix Navarro, recluido en Agüica, denunció el caso del preso Armando Gómez, quien lleva más de diez años confinado en la celda de castigo conocida como La Polaca en ese penal. El 20 de julio fue sacado de la celda de castigo Mario Alberto Hernández, quien se encontraba en esa situación en la prisión de Valle Grande hacía más de cuatro meses. En una visita que le permitieron, su esposa dijo que lo encontró muy delgado.
El ensañamiento de las autoridades, rayando en lo inhumano, se hizo palpable también en los casos de la madre del recluso Alexander Díaz, a quien la Seguridad del Estado llamó por teléfono para decirle que se presentara en la prisión Kilo 5 ½, pues le sería otorgada a su hijo la licencia extrapenal debido a la crítica situación de salud que padece. Cuando llegó al lugar resultó ser una mentira. A la presa política Ienelis Delgado, en la Prisión de Mujeres Granja 5 le impidieron tener una foto de su hija y le decomisaron toda la ropa blanca y negra que tenía.
Todas estas arbitrariedades son conocidas por los fiscales militares y jefes de prisiones quienes no realizan ningún tipo de acción para erradicarlas. Por el contrario, los reclusos que se atreven a sacar las denuncias hacia el exterior son castigados con amenazas de traslado, como ha sucedido con Léster Ayala y Lizandra Góngora, restricciones de llamadas telefónicas como hicieron a Ienelis Delgado y Félix Navarro y envío a celdas de castigo, como ocurrió con Julio César Vega, en las Mangas (Granma).
Durante el mes le fue negada la libertad condicional al preso político Ediyersi Santana (Cerámica Roja, Camagüey) y no le fue otorgada a los esposos Yusmely Moreno (Las Delicias, Mayabeque) y Danger Acosta (Quivicán), quienes ya cumplieron dos tercios de su condena y son padres de cuatro hijos que actualmente se encuentran bajo el cuidado de sus abuelos. Tampoco han permitido el pase a régimen de menor severidad a Ángel Miguel Martín (Quivicán), por negarse a participar en actos políticos, y a Oscar Alcibíades Peña (Boniato, Santiago de Cuba) de 79 años de edad; lo cual sí fue concedido a Angélica Garrido y Jorge Martín Perdomo, en ambos casos separándolos de sus hermanos, que continuaron en régimen severo.
También fue denunciada la situación de seis personas recluidas por protestar en Las Cañas, La Habana, por falta de fluido eléctrico el 1 de octubre de 2022 y que aún continúan presos sin que les hayan celebrado juicio. En situación similar se encuentra hace cinco meses el activista Alejandro Garlobo.
El 13 de julio fue liberado tras cumplir íntegramente su condena el preso político del 11J Yordan Manuel Escobar, sin embargo, el pasado 11 de julio fue regresado a prisión el manifestante Daniel Alejandro La Rosa.
Por su parte, Cubalex reportó el suicidio del prisionero José Luis Hernández, recluido en la prisión Kilo 5 ½.
En el mes, el Relator Especial sobre el derecho a la libertad de reunión pacífica y de asociación de la ONU, Clément Voule, se reunió con familiares de presos políticos. Además, el Parlamento Europeo y el Congreso de los Estados Unidos aprobaron sendas resoluciones condenando la represión en Cuba y exigiendo la liberación de los prisioneros políticos.
A continuación, se listan por orden alfabético algunos reclusos con situaciones delicadas de salud reportadas durante el mes de julio:
- Alexander Díaz: Su salud continúa empeorando luego de dos meses en la sala de penados del Hospital Abel Santamaría (Pinar del Río). Lo mantienen en un local tapiado, sin que le entre ventilación. Continúa caminando encorvado. Se niegan a concederle la licencia extrapenal.
- Carlos Raúl Perdomo: Fue trasladado al hospital del Combinado del Este, al parecer con tuberculosis.
- Dayron Martín Rodríguez: Continúa sin recibir tratamiento para la úlcera y la gastritis que padece. Ha estado varios días sin comer y ha vomitado sangre. Solo recibe uno de los cinco medicamentos que debe tomar para su esquizofrenia. La familia ha realizado múltiples denuncias, pero no recibe respuestas satisfactorias de las autoridades del Combinado del Este.
- Freddy Sarquiz: Fue trasladado al hospital del Combinado de Guantánamo. Se encuentra enfermo de los nervios y con la piel llena de granos infectados.
- Freydel Ramírez: Desde hace tres meses está padeciendo dolores en el pecho y las autoridades de la prisión 1580 (La Habana) se niegan a llevarlo a ver a un médico.
- Iván Colón: En la Prisión Provincial de Holguín le impidieron asistir al hospital a realizarse una placa de pulmón que tenía programada debido a su estado de salud delicado. Iván padece problemas de alcoholismo.
- Javier Delgado: A inicios de mes fue retornado a la prisión Guamajal a pesar de que persisten las condiciones de salud por las cuales le fue otorgado un año de licencia extrapenal. Ha trascendido en los últimos días que fue enviado a cumplir su condena en la sala de penados del Hospital Provincial Clínico Quirúrgico “Arnaldo Milian Castro” de Santa Clara.
- Jorge Yenier Ortiz: Continúa sin recibir los medicamentos que necesita para la epilepsia y está sufriendo hasta 30 convulsiones por día. Fue recluido en una celda de castigo en la prisión Las Mangas por reclamar sus derechos a la atención médica.
- José Daniel Ferrer: Prisionero en la cárcel Mar Verde (Santiago de Cuba). Continúa padeciendo fuertes dolencias y lesiones en la piel, para los cuales el sistema penitenciario no le proporciona medicamentos.
- Loreto Hernández: Devuelto a la prisión de Guamajal tras encontrarse ingresado varias semanas en el hospital civil Abel Santamaría debido a su grave condición de salud, la cual persiste, consistente en una cardiopatía y polineuropatía diabética.
- Lorenzo Rosales Fajardo: Padeció fiebres altas producto de un virus. No recibió medicación.
- Luis Miguel Alarcón: Perdió un diente y está a punto de perder una muela, que le fue fracturada durante el arresto violento en la manifestación de Caimanera. Está padeciendo un dolor intenso, no recibe atención médica. Le decomisaron medicamentos que le llevó su madre para la diarrea.
- Rolando Yusef Pérez: El 29 de julio aún se encontraba en huelga de hambre en la prisión de Quivicán y no había recibido atención médica luego de 19 días en esa condición. Se desconoce si ha depuesto la huelga o continúa.
- Osain Denis Trujillo: Recluido en la prisión Agüica. Sufre intensos dolores de cabeza, que no se alivian con medicamentos y no lo llevan a un especialista para ser analizado.
- Taimir García: Fue regresada a la prisión de Granja 5 a pesar de su grave estado de salud. Compañeras de prisión declararon que se encontraba convaleciente debido a la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, diabetes, hipertensión y sicklemia que padece.
- Tania Echavarría: Dama de Blanco recluida en la prisión La Bellotex. Se encuentra extremadamente delgada. Está padeciendo vómitos y diarreas.
- Yadir Ayala: Sufrió deshidratación debido a un fuerte cuadro de diarreas provocado por la alimentación en mal estado que le dan a los reclusos en Kilo 8.
- Jacqueline Heredia: Ha denunciado mala atención médica y falta de medicamentos en la prisión Cuba-Panamá, la cual debiera tener condiciones especiales, ya que ahí se encuentran los reclusos que viven con VIH.
- Yasmany González: Continúa bajando de peso, ha perdido dientes y muelas debido a que no recibe atención médica en el Combinado del Este.
- Yoirdan Revolta: En la Prisión Provincial de Holguín (Cuba Sí) continúan negándole asistencia médica y los medicamentos que necesita para su úlcera.
- Yunaiki Linares: Se encuentra enferma de los riñones y padeciendo hipotiroidismo. No recibe tratamiento en la Prisión de Mujeres de Occidente.
Justicia 11J realiza esta sistematización con informaciones públicas divulgadas en medios independientes y redes sociales, y con denuncias recibidas de manera directa de familiares, fundamentalmente de personas privadas de su libertad por razones políticas. La relación de eventos que documentamos aquí es únicamente un subregistro de incidentes represivos o violatorios de derechos al interior de las prisiones, que se presenta con la intención de fiscalizar de manera sistemática el cumplimiento de las Reglas Mínimas para el Tratamiento de los Reclusos de las Naciones Unidas, además del propio Reglamento Nacional de Prisiones y la Ley de Ejecución Penal. Este reporte forma parte de nuestros esfuerzos para que las organizaciones internacionales humanitarias y de derechos humanos #MirenLasPrisionesDeCuba.
Si conoce de otros casos que no hayan sido incluidos en este reporte, o puede ayudar a actualizar las informaciones, escríbanos a [email protected] o al WhatsApp +52 55 1236 2934.